Esta semana, algunos vecinos de la bahía de Portmany han tenido la fortuna de observar un delfín mular sin necesidad de subir a un barco. La bahía se transforma en invierno en un espacio en calma, con escaso ruido y poco tránsito de embarcaciones, ideal para que los delfines se alimenten con pequeñas presas. Su inteligencia los hace expertos en pescar y les otorga una gran capacidad de adaptación. Nunca paran de prender y de buscar su sitio en la costa, pese al impacto que genera la presencia de los seres humanos.
El delfín mular, también llamado tursón o nariz de botella (Tursiops truncatus) es, por su presencia habitual cerca de la costa y su carácter poco tímido en relación a los seres humanos, uno de los cetáceos más conocidos por los pescadores y otros observadores del mar.
La Asociación Tursiops ha comprobado científicamente cómo el incremento de la contaminación acústica afecta a la distribución de las poblaciones de delfines y otros cetáceos. El ruido fuerte que genera el tráfico náutico en la isla durante la temporada alta provoca que estos animales tengan que alejarse de las zonas más frecuentades para poder tener buena comunicación entre ellos. Por eso, quienes trabajan habitualmente en el mar saben que en verano resulta muy difícil verlos.
De la misma forma que a los humanos nos parece muy complicado comunicarnos con otras personas cuando hay mucho ruido, por ejemplo dentro de una discoteca, los delfines necesitan entenderse y utilizan la ecolocalización para pescar y alimentarse. Por eso, el ruido náutico constituye una interferencia que les obliga a alejarse.
La fotografía de las aletas es muy interesante para las organizaciones que estudian a estos animales, ya que las marcas que tienen en ellas permiten fotoidentificar a los individuos. Si tomáis alguna y nos las hacéis llegar, nosotros la compartiremos con los investigadores de estas especies.
Cabe recordar que el delfín mular es una especie protegida como el resto de cetáceos y que, por tanto, hay que respetarlo y cuidarlo para recuperarlo y que continúe viviendo en nuestras costas.
