El Ayuntamiento de Sant Josep, a través de la Concejalía de Playas y Litoral, ha procedido a la descontaminación por vía de emergencia de un velero de gran eslora que quedó embarrancado en la costa de la bahía de Portmany hace unas semanas, ante el riesgo de vertido de contaminantes en el litoral. El pasado 8 de noviembre se detectó que una de las embarcaciones que fondean habitualmente a la bahía, ‘La vida Lukas’, había quedado embarrancada en la zona de s’Estanyol. Se trata de un velero de unos 12 metros de eslora con dos mástiles, que durante la temporada fue avisado varias veces por es Voluntaris de sa Badia por estar fondeado sobre posidonia, haciendo caso omiso a estos requerimientos. Los vendavales de la semana pasada acabaron de lanzarlo contra las rocas, destrozando buena parte del yate.
Mientras se hacían las gestiones para tratar de identificar y contactar con los propietarios del velero, desde el Ayuntamiento se procedió a inspeccionar el velero para evaluar los daños que había sufrido. A raíz de estas inspecciones, se detectó la existencia de depósitos de combustible y motores, con el riesgo que, por el estado precario de la embarcación, en caso de sufrir más desperfectos, se produjera algún vertido de combustible y aceites al mar, según informa el consistorio.
Ante las previsiones de fuertes temporales anunciados para los próximos días, ayer se procedió a extender barreras anti-contaminación alrededor del velero y a su descontaminación, siendo necesaria la retirada de todos los líquidos contaminantes, además de varios productos químicos que se detectaron en el interior del ‘La vida Lukas’. Esta intervención ha tenido un coste de 5.000 euros para el Ayuntamiento.
En cuanto a la identidad de los titulares del velero, a quien se reclamará el coste de toda la operación si se llegan a localizar, las investigaciones iniciadas se están viendo dificultadas por el hecho de que esta embarcación no está matriculada. Por esta causa también se han iniciado los trámites para declararla como residuo, para que el Ayuntamiento pueda efectuar la retirada de manera subsidiaria, si fuera necesario. De esta forma, se ha solicitado la colaboración del Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil y se solicitará la correspondiente autorización a Capitanía Marítima para gestionar los restos de la embarcación.
Desde el departamento de Litoral se lamenta que “esta situación se está produciendo con demasiada frecuencia en los últimos años, debido al número de embarcaciones que fondean de manera incontrolada en la bahía de Portmany sin ninguna autorización”, ha declarado el concejal, Josep Guasch. Con el agravante que tampoco se dan “las condiciones de seguridad adecuadas, usando elementos como neumáticos, rocas o muertos de hormigón mal dimensionados”. Todo esto se pudo comprobar en el estudio de identificación de las estructuras de fondeo en la bahía de Portmany que el ayuntamiento encargó en 2020 y que identificó más de 80 estructuras de fondeo en esta zona del municipio, de las cuales más del 40% se encontraban sobre posidonia.
Como consecuencia de este estudio, en la temporada de 2021 se procedió por parte del Ayuntamiento, con la colaboración de Salvem sa Badia de Portmany y varias empresas de buceo profesional y gestión de residuos, a la retirada de 230 elementos de hormigón de la bahía. También se alejaron de la costa las embarcaciones con la ampliación de la zona de baño durante la temporada de verano para aumentar la seguridad de los bañistas, con el objetivo añadido de reducir los impactos de la ocupación de la zona costera por parte de estas embarcaciones.
Guasch ha reiterado que “es imprescindible la colaboración del resto de administraciones implicadas, principalmente la Demarcación de Costas y Capitanía Marítima, para identificar y actuar contra los responsables de estas prácticas”. El concejal ha señalado que “quién tiene las competencias tiene que perseguir las embarcaciones que navegan sin cumplir la normativa de seguridad marítima y multar de manera rápida y contundente el fondeo ilegal”. También ha pedido “agilidad” en los trámites para la instalación de campos de boyas regulados, tal como se establece en el marco del Decreto de Posidonia.