Durante la inauguración del nuevo edificio de Ports IB en Sant Antoni, que se celebró el pasado miércoles, el alcalde de la localidad, Marcos Serra, declaró que finalmente no se realizará la consulta popular que se había previsto para determinar la voluntad de los ciudadanos acerca de la continuidad o paralización del tráfico de ferris en la bahía, según ha publicado Diario de Ibiza.
Cabe recordar que, desde marzo de 2019, existe una moratoria que impide que los ferris operen en el puerto de Sant Antoni y que concluye el próximo 31 de diciembre. Ante esta circunstancia, el tripartido que gobierna el Ayuntamiento de la localidad (PP, Proposta per Eivissa y Ciudadanos) incluyó en el punto 5 de su pacto de gobierno “promover una consulta ciudadana para asegurar la mejor solución referente a la apertura y a la no privatización del puerto de Sant Antoni”. El pasado enero, el propio alcalde aseguró que este proceso se desarrollaría a lo largo de 2020: “Ya veremos qué sistema adoptamos: que sean los vecinos directamente o las distintas asociaciones constituidas en el municipio las que decidan qué futuro quieren para el puerto”, explicó entonces.
El miércoles, sin embargo, el alcalde dijo que quedaba descartada esta consulta ciudadana porque “la ley no permite que el Ayuntamiento convoque una consulta popular sobre una cuestión que no es de su competencia. Nosotros podemos pronunciarnos, pero Ports de Balears tiene la última palabra. Nuestra idea era hacer una consulta popular, pero al tener una competencia directa no podemos”, declaró.
Serra, además, abogó por la propuesta que su partido, el PP, defendía en el pasado mandato: “Si los camiones son molestos, al menos que se permita el tráfico rodado de los pasajeros con sus vehículos” y añadió que se debe reunir con sus socios de gobierno y con diversas entidades sociales del municipio para debatir esta cuestión. También con las navieras porque si se toman medidas y a éstas no les interesa operar en esas condiciones, “mejor decirles que directamente no vengan”, señaló Serra, tal y como se apunta desde Diario de Ibiza.
El alcalde también dijo que se pueden estudiar otras cuestiones para evitar los problemas de tráfico en el puerto, como que los ferris no embarquen ni desembarquen en horas puntas. Además, para evitar las molestias que ocasionan a los bañistas las olas que generan los ferris, Serra también señala la posibilidad de que los ferris lleguen y abandonen la bahía a primera y última hora del día y que se reduzca más la velocidad.
Es importante subrayar que el Comité Ciudadano de Sant Antoni, en el que están representados los sectores sociales y empresariales del municipio, ya votó por abrumadora mayoría que no debían volver los ferris al puerto porque representan más desventajas que beneficios, según se reflejó en el acta de aquella reunión. Además, otros colectivos de la bahía se han mostrado contrarios al retorno de los ferris.
Por su parte, el conseller balear de Movilidad y Vivienda, Marc Pons, que también acudió a la inauguración de la nueva sede, subrayó que antes de final de año se tiene que decidir si se recupera o no el tráfico de vehículos y mercancías mediante ferris en Sant Antoni. “En los próximos meses debemos mantener reuniones con el Ayuntamiento para concretar una respuesta. Nuestra voluntad es la de hablar las cosas y buscar acuerdos. Así hemos trabajado siempre», afirmó Pons.