El Govern balear ha presentado esta semana en Ibiza el proyecto de un nuevo decreto en elaboración que prevé crear dos nuevas reservas marinas de interés pesquero en la costa de poniente de Ibiza: es Vedrans y ses Bledes.
Esta medida se dio a conocer durante una reunión en la que participaron la consejera de Agricultura, Pesca y Alimentación del Govern, Mae de Concha; el director general de Pesca y Medio Marino del Govern, Joan Mercant, y el director general de Espacios Naturales y Biodiversidad de la consellería de Medio Ambiente y Territorio del Govern, Llorenç Mas, junto con el presidente del Consell d’Eivissa, Vicent Marí; el director insular de Medí Rural y Marí, Joan Marí, y todas las cofradías de pescadores de la isla. Antes de la aprobación del decreto, éste será sometido a consulta previa.
El proyecto de decreto, trabajado conjuntamente entre las consellerías de Agricultura, Pesca y Alimentación y de Medio Ambiente y Territorio, también incluirá un Plan Sectorial de Aprovechamiento Pesquero común para los espacios naturales protegidos con ámbito marino declarados por las Illes Balears, y establecerá los principios generales para regular la pesca y el marisqueo en todos aquellos espacios de la red ecológica europea ‘Natura 2000’ declaradas por las Balears. Por lo tanto, se convertirá en un mecanismo de colaboración permanente entre las dos consellerias competentes, para gestionar las actividades marinas y recursos marinos en estos espacios.
Mae de Concha ha explicado que la parte del decreto para la creación de las dos nuevas reservas marinas des Vedrans y ses Bledes ha sido trabajada y acordada con la cofradía de pescadores de Sant Antoni de Portamany, y que “forma parte de los Acuerdos de Bellver, puesto que queríamos incrementar el número y el espacio de las reservas”. La consejera se ha mostrado muy agradecida por la colaboración con la cofradía, la cual “ha hecho unas propuestas muy acertadas, con las que vamos muy en línea. De Concha ha recordado también que este decreto “será una regulación básica para todos los espacios que tienen algún tipo de protección en las Islas Baleares”, y que afectará tanto a la pesca profesional como a la recreativa, así como a las actividades subacuáticas.
En cuanto a los beneficios de estas reservas marinas para los pescadores, de Concha ha explicado que “la experiencia nos dice que en estas reservas hay mucha más biomasa, más especies de peces, más grandes y de más calidad, que se extienden más allá de las reservas”. También ha valorado muy positivamente la acogida de estas por parte del Consell d’Eivissa y ha añadido que “una vez más se demuestra que cuando trabajamos conjuntamente instituciones, cofradías y pescadores, así como el mundo del buceo, estos proyectos ayudan a todo el mundo”.
En cuanto al proceso de trabajo sobre las reservas, el director general de Pesca y Medio Marino, Joan Mercant, ha dicho que se inició por “la necesidad de hacer un plan de pesca adecuado a estas zonas de protección”. Así, en la zona de los Illots de Ponent “se necesitaba hacer una gestión de la pesca ya”, reclamada por el propios sector -en este caso, la Cofradía de Sant Antoni de Portmany-, a Pesca, para que fuera en forma de reserva marina de interés pesquero. Mercant ha remarcado que todo el sector y las diferentes administraciones “van en una línea consensuada, y estamos orgullosos de que sea así”.
Por su parte, el jefe de servicios de Recursos Marinos, Toni Grau, ha aclarado que con este decreto se pretende “hacer un marco común, coherente y que sea sencillo de aplicar para las administraciones en estos espacios”. En este sentido, ha afirmado que habrá tres niveles normativos para todas las zonas protegidas de las Illes Balears, y que las reservas marinas seguirán gestionándose con la normativa actual. Hay que recordar que las Balears son ya el territorio del Estado con más espacio marítimo protegido, con más de 63.000 hectáreas de reservas marinas, y que cada año se realizan más de 60.000 inmersiones entre todas las reservas marinas de las Balears.