Tras el vertido que ocurrió la semana en la playa de Punta Xinxó y que provocó el cierre de su orilla durante varios días, hoy ha vuelto a ocurrir lo mismo en Caló de s’Oli. Allí una alcantarillada ha comenzado a derramar aguas residuales hasta cubrir por completo la plaza donde se ubica el escenario exterior del auditorio.
La zona ha quedado totalmente cubierta por residuos fecales sin depurar y la suciedad ha vuelto a llegar al mar. Todo el entorno, según nos han transmitido vecinos de la zona, ha quedado afectada por una pestilencia tan intensa que la piscina de un hotel cercano se ha quedado vacía porque los clientes alojados no podían soportar el hedor.
La avería se ha producido alrededor de las 15,30 horas, según Diario de Ibiza, a causa de una nueva avería en el bombeo de la depuradora, cuyo mantenimiento es responsabilidad de la Agencia Balear del Agua (Abaqua), que depende de la Conselleria de Medio Ambiente del Govern balear.
Toda la zona se encuentra afectada por una infraestructura muy antigua, de alrededor de medio siglo de antigüedad, con una canalización de fibrocemento cuyas roturas provocan averías constantes. El problema persistirá hasta que esta tubería y el resto de estaciones y redes asociadas se modernicen con la construcción del nuevo paseo marítimo que debe bordear casi todo el perímetro de la bahía de Portmany, desde Cala Gració hasta Port des Torrent.
A última hora de esta tarde la suciedad aún seguía manando y la plaza del recinto cultural aún no había podido limpiarse.